¿Qué son los disruptores hormonales ? Las hormonas son unas moléculas de nuestro cuerpo producidas por las glándulas endocrinas, las cuales viajan a través de la sangre para producir efectos en células y tejidos distantes. Las principales glándulas endocrinas que tenemos son: la hipófisis, que se encuentra en la base de nuestro cerebro, la glándula tiroides en el cuello, las glándulas suprarrenales junto a los riñones, las gónadas (ovarios o testículos) y el páncreas. Además de estas células especializadas, hay otras estructuras que también tienen la capacidad de secretar hormonas como la grasa corporal, el músculo o los intestinos.
Los efectos que tienen estas hormonas en nuestro cuerpo están mediados por unas proteínas específicas llamadas receptores; sin los cuales las hormonas no podrían llevar a cabo su función.

Teniendo esto en cuenta, definamos lo que es un disruptor hormonal: son sustancias exógenas que alteran una o más funciones de nuestro sistema endocrino y, en consecuencia, provocan efectos adversos en la salud de un organismo. Dichas sustancias son creadas mayoritariamente por el ser humano y se encuentran en productos como pesticidas, metales, aditivos o contaminantes en la comida, en productos de cuidado personal o cosméticos, etc. Nuestra exposición a estas sustancias se da a través de la ingesta de comida, polvo y agua. También es posible a través de la inhalación de gases y partículas en el aire y a través de la piel.
Para poder actuar, estas partículas se unen a nuestros receptores hormonales y se comportan como si fueran una de éstas, alterando el buen funcionamiento de nuestro sistema hormonal. Esto puede ser dañino porque la salud humana depende del buen funcionamiento del sistema endocrino, el cual regula la liberación de hormonas responsables de procesos fisiológicos esenciales para nuestro cuerpo, tales como el metabolismo, el crecimiento y desarrollo, el sueño o el estado de ánimo.

Los aspectos en los que se ha estudiado que pueden afectarnos especialmente son la salud reproductiva, tanto femenina como masculina, problemas relacionados con la tiroides, el desarrollo de cánceres relacionados con las hormonas (en ovario, en pecho, en próstata,…), desórdenes metabólicos o alteraciones en la función inmunitaria.

En el año 2012 la Organización Mundial de la Salud emitió un comunicado exponiendo la información que teníamos hasta las fecha sobre estos disruptores. En la última década se han publicado una gran cantidad de artículos demostrando la existencia de estas partículas y los efectos que tienen en diferentes aspectos de nuestra salud. Aun así es necesario llevar a cabo más investigaciones en este campo para conseguir más información al respecto.

Candelaria Vicente
Fisioterapeuta / Colegiada nº 12.222