Cuando sufrimos una lesión pasamos por dos procesos, el primero consiste en recuperar el tejido lesionado y el segundo en re-adaptar las estructuras que no estaban siendo funcionales para que puedan volver a realizar su gesto deportivo o funcional habitual.

Hoy en día podemos encontrar varios profesionales de ámbitos distintos que nos aseguren pueden guiarnos y aconsejarnos en este proceso, a la hora de escoger hay que tener varios aspectos en cuenta.

Los profesionales de INEF, CAFE o preparadores físicos que podemos encontrar en los gimnasios son grandes profesionales que se dedican al acondicionamiento del cuerpo para que este pueda realizar de forma más óptima su actividad diaria sea deportiva o no.

Pero cuando ha habido una estructura dañada aunque esta ya haya regenerado, será básico conocer la patología, sus períodos de recuperación y necesidades particulares para su óptima puesta a punto.

Toda estructura que trabajemos desde el aspecto físico, sea tonificación, movilidad o estabilidad deberemos hacerlo teniendo en cuenta la patología que sufrió previamente.

Será importante que sea el fisioterapeuta el que proponga una primera actividad de ejercicio terapéutico para poner en marcha esa estructura antes de que el preparador físico ya pueda poner todo el cuerpo a tono para afrontar la actividad física que el paciente quiera realizar y lo haga con la mayor eficiencia.

Francesc Arjalaguer  / Fisioterapeuta colegiado nº 6962