La fisiosexología

La fisiosexología es una rama dentro de la fisioterapia del suelo pélvico que trata las disfunciones sexuales que afectan tanto a hombres como a mujeres. El placer forma parte de las funciones del suelo pélvico; sin embargo puede haber alguna alteración en las estructuras  involucradas que altere dicha función, ya que es necesario que la musculatura del periné esté en un estado correcto de fuerza, tono y flexibilidad. También es necesario que la vascularización y la inervación de los tejidos sean óptimas.

La respuesta sexual femenina

Antes de la existencia del concepto de fisiosexología, en la década de los 60, el matrimonio formado por William Masters y Virginia Johnson revolucionaron el conocimiento existente sobre el sexo.  Fue entonces cuando empezaron a estudiar la respuesta sexual humana, analizando por primera vez el orgasmo femenino y el papel que desarrolla el clítoris para poder llegar a éste. Su teoría ha ido evolucionando a lo largo de los años y, según el modelo utilizado hoy en día, la respuesta sexual femenina consta de las siguientes fases:

  1. Excitación: aumenta el aporte sanguíneo hacia los órganos genitales. Se produce la erección del clítoris, que puede llegar a duplicar su tamaño. La vulva se dilata y aumenta su lubricación. Estos cambios son equivalentes a la erección del pene en el hombre. También se produce una erección de los pezones y un aumento progresivo de la frecuencia cardíaca.
  2. Meseta: el estado de excitación es más avanzado. Es el momento previo al orgasmo. Durante esta fase, el estado congestivo de los órganos sexuales alcanza su máximo en ambos sexos.
  3. Orgasmo: se producen contracciones intermitentes de la musculatura tanto voluntaria como involuntaria. Se produce un pico de la presión arterial y frecuencia cardíaca. En algunas mujeres es posible que se produzcan más de uno.
  4. Resolución: es el retorno a los valores funcionales normales; se reduce la vasocongestión pélvica y se relaja la musculatura. Se acompaña de un “período refractario” durante el cual es difícil volver a desarrollar otra respuesta sexual. Dura varios minutos y se alarga progresivamente con la edad. Este fenómeno es más característico en el varón. En la mujer, se pueden producir estados similares de refractariedad, especialmente tras orgasmos muy intensos.

Todos estas etapas son las estudiadas dentro de la categoría de fisiosexología.

¿Qué patología podemos encontrar en la mujer?

– Dipareunia: dolor al mantener relaciones sexuales. Se presenta durante la penetración, pero puede aparecer antes, durante o después del acto. Pueden estar asociadas a un componente emocional, pero a nivel físico pueden ser causadas por  una episiotomía o desgarro en el parto, un prolapso visceral, falta de lubricación (especialmente en menopausia) o hipertonía en la musculatura del suelo pélvico.

– Vaginismo: dificultad de realizar el coito, debido a la contracción involuntaria de los músculos del tercio inferior de la vagina.

– Anorgasmia: descenso o ausencia de la sensibilidad en la vagina, lo que conlleva una disminución en la intensidad de orgasmo. Suele estar relacionado con una falta de tono o fuerza en la musculatura perineal.

¿Cómo se puede tratar?

– Propio conocimiento. La autoexploración permite conocer su propio cuerpo y saber qué es lo que nos da placer y lo que no; imprescindible antes de tener relaciones con otra persona. Nos podemos ayudar de un espejo.

– Educación sexual. Entender que las relaciones sexuales van más allá de la penetración, ya que hay otras maneras de sentir placer. Para ello también es posible ayudarse de algún juguete.

– Tratamiento en consulta. Cuando hay una patología presente, es imperativo consultar a un especialista para que nos diagnostique y pueda establecer una pauta de tratamiento.

– Ejercicios. La práctica de gimnasia abdominal hipopresiva y de ejercicios de Kegel puede mejorar el tono y la fuerza del suelo pélvico.

– Equipo multidisciplinar. Es posible que se necesite la ayuda de un psicólogo cuando hay componentes emocionales en la patología presente.

Si te interesaría conocer algún contenido más acerca de la fisiosexología, no dudes en plantearnos tu duda en los comentarios.

Candelaria Vicente

Fisioterapeuta colegiada nº 12.222